Lo que sorprende es el volumen del gasto, acaso desmedido, tratándose de una sola campaña de marketing: son exactos 113.890.000 de pesos, que a dólar oficial demandarán la friolera de casi 14 millones de dólares.

En un escenario en el que la Nación negocia con el FMI una restructuración de la deuda y restringe la adquisición de moneda extranjera (por caso, los viajes al exterior financiados), Kicillof aprobó una erogación millonaria a solo fines de una campaña publicitaria puntual, en el marco del “Programa Bonaerense de Turismo Estudiantil” aprobado por el Decreto 973 de 2021.

Serán 50 mil mochilas, igual cifra en botellas deportivas de plástico PET y otro tanto en gorros de algodón/poliéster “de tipo piluso”, con la marca institucional “Recreo” y el logo de la Provincia de Buenos Aires.

Así, en el actual contexto de delicado desequilibrio fiscal, reservas al rojo y un acuerdo de reestructuración de deuda con el FMI que aún deberá ser refrendado por el Congreso de la Nación, Kicillof gastará casi 114 millones de pesos en solo una campaña publicitaria (de las tantas que tiene, además)

Pero la novedad retrotrae al 2001, cuando la Provincia compró 800 mil pares de zapatillas con la firma del ese entonces gobernador justicialista Carlos Ruckauf y la marca institucional “Buenos Aires para todos”, a un costo de 4,10 dólares el par.

En dos tramos, la gestión de Ruckauf gastó 16.4 millones de dólares (el total de la campaña era el doble, casi 33 M de dólares) a solo fines de publicitarse.

En el contexto económico de marzo de 2001, el desmesurado gasto de Ruckauf para promocionar su gestión fue un escándalo político y mediático de magnitud, por desmedido y proselitista.

No estaría pasando lo mismo hoy…