La Plata: ¿Cómo repercute la "ruptura" del Frente de Todos en el Concejo Deliberante?
La implosión dentro del Frente de Todos nacional tras la negativa del camporismo de avalar el refinanciamiento de la deuda contraída por Cambiemos con el FMI repercute en menor o mayor medida en las sedes legislativas de los distritos bonaerenses y La Plata no es la excepción.
Aunque a una semana de la votación en Diputados nadie se pronunció de forma pública, las repercusiones sobre una posible ruptura entre el sector que comulga con el albertismo y el cristinismo duro están a la orden del día, rumores mediante.
En el Concejo local, el bloque FdT tiene 10 bancas, y el camporismo y sus sectores afines esperan “señales desde arriba” antes de exhibir un posicionamiento explícito que permita vislumbrar un quiebre con el ala moderada, que incluye al massismo.
Aunque nadie lo dice, un hipotético escenario de escisión del peronismo no haría más que fortalecer al armado de Julio Garro, que tiene a disposición 14 manos levantadas, aunque la interna de Juntos también tomó temperatura al calor de los cortocircuitos a nivel nacional. “A río revuelto ganancia del pescador” repiten en el garrismo.
Los ediles que responden al espacio del presidente están alineados al espacio de la diputada nacional Victoria Tolosa Paz y ambos ingresaron al recinto el año pasado. Se trata de Cintia Mansilla y de Juan Manuel Granillo Fernández (Casa para la Victoria Peronista).
El cristinismo duro tiene principalmente representación femenina: las ediles Ana Negrete (Facultad de Periodismo y aliada de Florencia Saintout), Yanina Lamberti –presidenta de bloque- y Paula Lambertini. La última trabajó en la pasada campaña para el espacio de Saintout, pero es del riñón del ex jefe de Gabinete del ex intendente Pablo Bruera, Santiago Martorelli, un desertor histórico del Movimiento Evita.
Los chispazos, que asomaron en algunas reuniones de comisiones, todavía no se materializaron en las sesiones públicas del deliberante. La tropa peronista intenta consensuar una “agenda común” que le permita jugar “la guerra dialéctica” contra Garro y no perder protagonismo en los medios.
Las posiciones de los legisladores de Todos sobre el acuerdo con el FMI siguen las líneas políticas nacionales. Por ahora, el gran acuerdo entre los ediles se dio en torno al pedido conjunto de interpelación a Garro por su participación en la “Gestapo antisindical”, pero no pudieron llevar al alcalde al recinto por la situación de minoría parlamentaria.
Las comisiones en veremos
En el orden estrictamente legislativo, otro tema que sobrevuela el recinto entre indefiniciones es el reparto de las comisiones.
Producto de los cortocircuitos entre el oficialismo y Todos, la composición de esos núcleos de trabajo parlamentario todavía no fue definida, lo que suele ocurrir generalmente antes de marzo.
La semana que comienza podría ser clave a la espera de novedades en el cuerpo que preside el garrista Darío Ganduglia.