Marginalidad extrema: la canasta básica subió nueve puntos en octubre y la pobreza estimada alcanzó el 40 por ciento

El INDEC confirmó de manera oficial que una familia tipo de cuatro integrantes debió llegar a la suma de 138.738 pesos en el mes de octubre para no ser pobre como parte de la Canasta Básica Total (CBT), que define la línea de la pobreza. Para una familia compuesta por tres integrantes el monto llegó a los 111.248 y 45.223 pesos para un adulto equivalente.
La canasta básica tuvo un violento aumento del nueve por ciento en relación al mes de septiembre, un dato muy por encima de la inflación del 6,3 por ciento registrada por el propio INDEC para octubre. Cada vez que la canasta básica aumenta por encima de la inflación genera una fuerte presión para el aumento de la tasa de pobreza.
[NOWCAST DE POBREZA] Usando los datos de inflación publicados ayer para actualizar la CBT, el nowcast proyecta una tasa de pobreza para el semestre mayo-octubre de 2022 de 39.7% con un IC al 95% [38.9%, 40.5%]. Gráfico interactivo y otra información acá:https://t.co/FldpijJEDk pic.twitter.com/i1TQpYCRcg
— Martin Rozada (@MartinGRozada) November 16, 2022
La pobreza se mantuvo en un sendero decreciente tras la recuperación económica entre octubre de 2020 y abril de 2021, pero a partir de entonces el nivel general de precios subió sistemáticamente por debajo de los precios que componen la línea de la pobreza.
El economista Martín González Rozada estima que la pobreza habría llegado al 39,7 por ciento en el semestre móvil que finalizó en octubre. Su nowcast de pobreza, publicado en la Universidad Torcuato Di Tella, muestra que la cantidad de personas que cayeron en esta situación aumentó constantemente desde mayo, y el indicador acumuló un aumento de casi cinco puntos.
Asimismo, el INDEC confirmó que la Canasta Básica Alimentaria (CBA) para una familia de cuatro integrantes ascendió a un monto de 62.106 pesos para evitar caer por debajo de la línea de la indigencia, equivalente a 20.099 pesos por adulto.
Sobre este segmento se registró un aumento del 9,5 por ciento en comparación con el mes anterior, y se concluye que el impacto inflacionario fue incluso más adverso para la indigencia que para la pobreza, en un efecto completamente regresivo.
De hecho, y a diferencia de lo que ocurrió con la pobreza durante el primer trimestre del año, la tasa de indigencia se divorció del rebote económico y saltó del 8,2 por ciento en el último cuarto de 2021 al 8,8 en los primeros tres meses de 2022. Los datos para octubre no hacen más que confirmar la tendencia alcista sobre este indicador.