Por Agustina Casalongue, psicopedagoga, especial para NOVA
El bienestar refiere a un ser que se encuentra en armonía con sus áreas bio-psico-sociales. Es decir, una persona que cuida de su cuerpo, de su psiquis, y de sus relaciones interpersonales.
¿Por qué hablo de esto? Porque muchas veces cuando se acude con un niño a terapia, ya sea psicológica, psicopedagógica u otra, olvidamos que la persona que está llevando al niño a consulta también debe pensar en su bienestar, ya que, alteraciones o situaciones de estrés por parte de los padres afectan a la sensibilidad del niño.
El cuidado de uno mismo, como ir al psicólogo para tener un espacio donde dejar los problemas y no llevarlos a casa, el momento de tomar sol o de salir a caminar, salir con amigos, mantener relaciones sanas, son aspectos que muchas veces no son considerados.
Debemos aceptar y abrazar la idea de que cuando estamos a cargo de alguien más no podremos cuidar de él si primero no nos proporcionamos ese cuidado a nosotros mismos. El amor propio permite que se despliegue el amor y cuidado por el otro.