Llamó la atención de propios y extraños como una legisladora provincial que además ocupa cargos importantes en su partido, comenzó hace varios meses a tener una intensa actividad recorriendo diferentes puntos de la provincia de Buenos Aires incluso antes de que comenzaran las discusiones electorales.

Si bien es cierto que la actual legisladora terminó ocupando un lugar importante en una de las listas de precandidatos del Frente Juntos, la realidad es que nadie cree que eso se deba a esas “escapadas” que se multiplicaron sin demasiada promoción y prácticamente sin cobertura de prensa de los resultados.

Pero lo que más llamó la atención en el propio entorno de esta importante dirigente es que los viajes los realizaba únicamente con la compañía de su “secretaria”, evitando a como dé lugar cualquier otro tipo de integrante de la comitiva.

Incluso en los mentideros políticos se sostiene que en más de una oportunidad eligió suspender y/o cambiar las fechas de sus supuestas recorridas proselitistas para evitar coincidir con otros correligionarios en algún distrito, por lo que la sospecha es que tanto misterio es el resultado de haber estrechado muy “íntimamente” una relación con su principal colaboradora.

Para colmo de males, Alejandra, que así se llama esta referente del partido centenario, está formalmente en pareja con el hijo de otro importantísimo dirigente de ese espacio que tendrá que acostumbrarse al gorreo con diversidad de género.

Al superministro no le dio la nafta

Otrora un “hombre fuerte” del gobierno provincial, Sergio Berni se cansó de alardear que él respondía únicamente a Cristina Kirchner, por lo que lo tenía sin cuidado la opinión del gobernador Axel Kicillof o la del presidente Alberto Fernández, aunque ahora parece haber pedido la estrella.

La decisión de bajar su candidatura en la segunda sección electoral, más que una decisión fue una clara consecuencia de la pérdida de poder que supo tener el titular de la cartera de Seguridad que parece haber agotado el argumento con el que solía terminar sus discusiones: ¡Pregúntenle a Cristina!

Según trascendidos, lo que ocurrió fue que finalmente y a contramano de lo que hubiera esperado el ministro, alguien le preguntó a Cristina si la vicepresidenta habría desautorizado su postulación, lo que desactivó automáticamente toda la jugada del funcionario provincial.

Además, como consecuencia de ese episodio en provincia aseguran que “se le terminó el crédito” a Berni, por lo que esperan que la relación cambie de forma drástica en la segunda mitad del Gobierno del Frente de Todos o quizá no quede lugar en el gabinete para sus andanzas.