“Lamentablemente la vida nos jugó una mala pasada, cuando se produjo el deceso de Ayala. Hasta ese momento, veníamos los últimos treinta días, haciendo movimientos ilícitos, si se quiere decir así, para poder cumplir con las obligaciones de la institución”, decía un audio recopilado y difundido en los medios.

En tan poco tiempo, Voytenco cosechó las denuncias y movimientos dudosos que lo ponen al borde del colapso, esto sumado a que recibió dos cachetadas judiciales muy duras, la primera proveniente de la cámara Federal que resolvió darle competencia a Casanello y pide que avance con la indagatoria y procesamiento de Voytenco y Cristian Ayala, hijo del fallecido conductor, también que dicte las medidas necesarias para que se cumpla el fallo de la cámara laboral donde piden que reintegren los cargos a los desplazados del consejo directivo de Osprera.

Según diversas fuentes, se comprobó la administración fraudulenta y, eso conlleva a una pena de 3 a 6 años de prisión. Además, si se comprueba la denuncia de las firmas truchas, el período en la cárcel sería mucho mayor. Es por eso que la denuncia realizada en el fuero penal es tan importante, ya que el presidente de la OSPRERA, José Voytenco, el gerente de auditoría que usurpó la firma del vicepresidente sumado al gerente de Finanzas, Fernando Alarcon, han firmado y pagado en estos meses más de 4 mil millones de pesos sin tener ningún tipo de autorización del consejo directivo y, hasta han falsificado también ante los bancos la firma del tesorero de la obra social, Carlos Caballero.

Se va cerrando el círculo y Voytenco solo cuenta con el apoyo de Alberto Barra y Carolina Llanos sumado al polémico intendente de San Pedro, Cecilio Salazar. ¿Cómo seguirá la situación?