Partidarios y opositores al nuevo proyecto de ley anti-LGBT de Ghana se enfrentaron en el parlamento el miércoles, en las primeras audiencias públicas sobre la legislación propuesta que convertiría en un delito ser gay, bisexual o transgénero.
Akoto Ampaw, un abogado que representa a una coalición contraria la ley, recibió abucheos esporádicos cuando dijo en la sesión que el proyecto de ley Valores Familiares sería “totalitario” e “inconstitucional”.
S.O.S. from Ghana: Under a proposed anti-LGBT+ bill, anyone suspected of being LGBT+ could be punished with 5 years in prison. Sign and stop the bill in its tracks now. #KillTheBill @LGBTRightsGhana https://t.co/LZHptM5Vl6
— mimi MEGTAN hoodlumꨄ era (@mimisunshin) November 11, 2021
En el lado opuesto del debate, Abraham Ofori-Kuragu, un representante del consejo pentecostal de Ghana, dijo ante la tensa cita de legisladores y medios que el proyecto de ley refleja la voluntad de la mayoría de los ghaneses.
No ha habido encuestas de opinión nacionales sobre el proyecto de ley, que ha sido condenado por expertos en derechos de la ONU. No obstante, los partidarios dicen que la legislación tiene un amplio respaldo en el país mayoritariamente cristiano de África Occidental.
La práctica homosexual ya se castiga con hasta 3 años de prisión en Ghana, aunque nadie ha sido procesado en años. El nuevo proyecto de ley iría más allá, alargando las penas de cárcel y obligando a algunos a someterse a una “terapia de conversión”, prácticas destinadas a cambiar la orientación sexual de una persona.
También criminalizaría la promoción y la financiación de actividades LGBT, así como las demostraciones públicas de afecto entre personas del mismo sexo y travestismo.
“Las mismas disposiciones del proyecto de ley avivan el odio, la intolerancia y la violencia contra una pequeña y vulnerable comunidad minoritaria”, dijo Ampaw en su declaración de apertura ante la Comisión de Asuntos Constitucionales, Legales y Parlamentarios.
Los grupos de derechos LGBT+ en Ghana dijeron que han visto un aumento en los ataques homofóbicos desde que se presentó el proyecto de ley en agosto.
La homosexualidad sigue siendo un tabú en muchas sociedades africanas socialmente conservadoras, donde algunos grupos religiosos la han calificado como una importación occidental corruptora.
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