"Sin derramar ni una gotita de dolor"

El amor siempre es hermoso, sin importar el nivel de pasión.

En las relaciones de las personas, sin importar el género, se llega a un cierto nivel de pasión, de “locura” y de enamoramiento. A algunos les provoca mayor intensidad y a otros menos, pero siempre relacionado al amor.

El ejemplo más claro es en los inicios de las conquistas, cuando se empiezan a conocer y poco a poco van bajando el tenor del placer.

Prácticamente, la mayoría se destaca al elegir al “Amor Salvaje” como una característica a la hora intimar. Otros, son un poco más introvertidos, pero terminan llegando a ese nivel.

Emulando al cantante del Chaco salteño, muchos alcanzan comparaciones tales “como una selva tropical nos incendiamos”, también se puede mencionar que el acto sexual se realiza “sin derramar ni una gotita de dolor” pero, en fin, todo termina con el coito. El producto siempre es el mismo.

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