No espere a ser diputado: aproveche cuando se caiga internet

La lengua del dirigente salteño Juan Emilio Ameri dio la vuelta al mundo, además de haber girado por los pechos de su pareja y hay quienes piensan que ese privilegio es solo para los que ocupan una banca en el "honorable" Congreso de la Nación.
Sin embargo, el secreto no está en el poder de la política para manejarse de manera impune, sino en la precariedad del servicio de internet. En tiempos de pandemia las conexiones se han saturado y se han vuelto más lentas, como le pasó al pobre legislador, que ante una caída de la red tuvo un ataque de angustia oral y encaró para lo primero que encontró.
🚨#EXCLUSIVO | La explicación del diputado @JuanEmilioAmeri a Data Clave: "Estoy mal, muy mal. Pensé que se había caído internet. Vino mi pareja a mostrarme cómo le quedaron las prótesis mamarias. Y le di un beso en la teta, eso fue todo". pic.twitter.com/yOUC8ThTm2
— Dataclave (@Dataclave) September 24, 2020
Así que no se ponga mal si no tiene un ostentoso salario y una banca en la Cámara de Diputados. No es necesario para zambullir su cabeza en los atributos de su pareja.
Con que se corte internet un rato ya tiene la excusa perfecta para llamarla, bajarle la remera y meter mano, o lengua, o diente o lo que tenga ganas. Eso sí: trate de que la cámara esté apagada, no vaya a ser cosa que lo rajen del laburo.