- ¿Cuándo comenzó sus estudios actorales?

- Descubrí la actuación de casualidad, en realidad. En el año 2011 me inscribí en una escuela de música para estudiar la carrera de vocalista y resultó que una de las materias a cursar era “Taller de expresión para cantantes”, que no era otra cosa más que teatro.

Nunca antes había tenido contacto con la actuación, en ninguna de sus formas, y fue una grata sorpresa para mí encontrar en la actuación una nueva pasión, además del canto. Me enamoré por completo de la creación de personajes y la interpretación. Entendí que podía contar algo no sólo con mi voz, sino también con la mirada, con el cuerpo; que al estar callado e inmóvil también podría estar diciendo algo. Incluso sin valerme del respaldo de una armonía.

Me pareció absolutamente fantástico desde el primer momento en que comencé a experimentarlo. Y le debo un enorme agradecimiento a la profesora encargada de dictar esas clases, Daniela Trakal, una persona hermosa que logró transmitir todo su amor por el arte interpretativo a alguien que era un completo escéptico en la materia.

- ¿Donde nació?

-Nací en San Francisco, provincia de Córdoba. Pero mi partida de nacimiento dice Tandil, provincia de Buenos Aires. Vivo en Río Ceballos desde los diez años.

- ¿Cuál fue su primer trabajo como actor?

- Un cortometraje para estudiantes de segundo año de Cine de la Universidad Nacional de Córdoba. Si bien ya manejaba la técnica actoral, después del taller de teatro en la escuela de música me inscribí en el profesorado de Teatro en la Roberto Arlt, no tenía ni idea de cómo se llevaba a cabo un rodaje, en general, no conocía más de lo que conoce un mero espectador de una película. Pero ese día tuve mi segunda gran sorpresa con el mundo de la actuación: descubrí que actuar frente a cámara me apasionaba muchísimo más aún que actuar sobre un escenario.

No lo podía creer, me sentía cómo en un sueño lúcido. Ver todo el despliegue de cosas y gente que convergen en un pequeño lugar para darle forma a un espacio ficcional y contar una historia, y ser parte de ese mundo… Me suelo quedar sin palabras cuando hablo de estas cosas porque me quedo corto de adjetivos para describir el placer que me produce actuar frente a cámara.

- ¿Cuál fue la reacción de su familia ante su profesión?

- Quizás esa fue la tercera gran sorpresa. Me apoyaron desde el primer momento para que me anime a seguir estudiando e instruyéndome en esto. Por supuesto que mi vieja y mi viejo siempre andaban tirando ideas de alternativas relacionadas con el arte actoral para tener en cuenta por las dudas, y no quedarme sólo esperando a que me llamen para actuar. Por eso el Profesorado de Teatro. Pero nunca tuve una negativa de su parte y me siento muy afortunado, ya que no cualquiera tiene el apoyo inmediato e incondicional de su familia.

- ¿Cuáles fueron las experiencias más importantes de su carrera?

- Cada nuevo trabajo que fue surgiendo lo sentí como la experiencia más importante, porque el simple hecho de ser convocado para actuar en un proyecto, sea cual sea, me alegraba y llenaba de orgullo por haber conseguido una “victoria” más. Cada vez que me llaman pienso: “Vamos loco, uno más”. Y eso significa una nueva experiencia, un nuevo aprendizaje y la oportunidad de seguir disfrutando y entrenando a la vez. Mantenerse activo en esta profesión es tan importante como lo es salir a correr todos los días para un atleta. Y siento que en cada nuevo personaje que interpreto voy mejorando y puliendo mi técnica.

Así que, en definitiva, creo que el mayor logro es que al día de hoy, después de 5 años desde que participé en el primer cortometraje de mi carrera, me siguen llegando oportunidades para seguir actuando.

- ¿Cómo es según su experiencia el desarrollo de un actor en el mercado local?

- Autogestivo, constante y sumamente perseverante. No se puede prescindir de ninguna de esas tres cosas en Córdoba. Si te falta alguna de ellas, te vas a quedar a medio camino. Ya de por sí la carrera del actor/actriz es bastante complicada. Hay que estar lo suficientemente loco y enamorado de este arte para querer adentrarse cada vez más en este mundo. Me alegro de no carecer de ninguna de estas últimas dos.

- ¿Cuál es el beneficio para la provincia el tener un Polo Audiovisual?

- Se amplían las oportunidades para muchos realizadores audiovisuales locales. Lo que ayuda, claro, a la concreción de muchos más proyectos. Y al haber más proyectos, hay más trabajo. Y el trabajo va a ser siempre bienvenido acá y en cualquier otra parte del mundo.

También, con la existencia del Polo, se fomenta muchísimo la producción audiovisual y el consumo de la misma. Es una motivación enorme, o por lo menos, yo lo siento así.

- ¿Cómo vive la situación de pandemia mundial?

- Si pienso en mí mismo, puedo decir que estoy tranquilo y me mantengo positivo respecto al futuro inmediato. Pero si pienso en los estragos que está ocasionando y la realidad que nos vemos obligados a transitar, no se de dónde agarrarme para creer que después de “esto” todo va a estar bien y va a volver a ser como antes. No por el virus en sí mismo, sino por las dificultades que atraviesan millones de personas en todo el mundo, y sobre todo en Latinoamérica. Me preocupa más que va a pasar en el futuro con las economías devastadas que está dejando la pandemia.

- ¿Qué proyectos laborales tiene?

- Si las gigantescas ganas de seguir actuando pueden considerarse como un proyecto laboral, ese es uno de mis proyectos. Cuando se reanuden los rodajes pretendo sumarme en cuanto proyecto se me cruce por el camino. Pero no sólo como actor, ya que dirigir yo mismo es una gran cuenta pendiente. Quizás, al igual que el inicio de mi carrera como actor, arranque con un cortometraje.

Por otro lado quiero grabar un disco con canciones propias. Las canciones ya están, me encuentro en el trámite de patentar mis composiciones y reunir los músicos necesarios para grabar. Salir a tocar quedará a merced de la pandemia, la cuarentena, el Presidente y el mismísimo destino.

- ¿Hay algún sueño que quisiera alcanzar?

- Si de imposible hablamos, cantar con Freddie Mercury; actuar con Peter Lanzani, que me parece un monstruo de la actuación; y si logro perfeccionar mi inglés no me desagradaría para nada compartir escena con Joaquín Phoenix o Leonardo DiCaprio.