Tras la reapertura del CREU de Lomas de Zamora, trabajadores denuncian pésimas condiciones laborales


Con una manifestación en el playón de estacionamiento del Centro de Recepción, Evaluación y Ubicación (CREU), de Lomas de Zamora, este lunes 24 de agosto, los trabajadores del Organismo Provincial de Niñez y Adolescencia denunciaron que, tras la reapertura del instituto, las condiciones de bioseguridad no están garantizadas para el personal ni para los jóvenes.
Como se recuerda, las instalaciones del CREU fueron cerradas por completo luego del brote de casos donde 28 trabajadores y 11 jóvenes dieron positivo a las pruebas de Covid-19. Tras cumplirse el ciclo de aislamiento, este jueves 20 de agosto las autoridades determinaron la reapertura y la vuelta al trabajo. Los trabajadores vuelven a advertir que las mismas condiciones de seguridad e higiene son las mismas que las anteriores al brote de casos.
Así las cosas, lo que motorizó el reclamo es que al terminarse el ciclo de aislamiento después del brote de contagios, “vemos que la situación sigue siendo la misma porque los insumos no son los necesarios y no hay capacitaciones en el uso y la manipulación de los mismos”, señaló a NOVA el representante gremial Fernando Fernández del CREU de Lomas de Zamora.
La jornada arrancó con una asamblea en el playón en el que se expusieron las condiciones en las que vienen desarrollando sus labores. A la vez que repartían el mate cocido, los empleados señalaron que “no hubo ningún tipo de información oficial para volver a las guardias comunes”.
Tras la protesta, Fernández evidenció “la actitud” de Omar Moya, director provincial del Sistema de Responsabilidad Penal Juvenil, y de Martín Mollo, director provincial de Institutos, que “son quienes nos tratan con mucha prepotencia ante los requerimientos”, sin hacer lugar a los pedidos.
“Estamos responsabilizando, principalmente, en ellos el colapso de los institutos de menores”, remarcó el gremialista y llamó a que el ministro de Desarrollo de la Comunidad, Andrés “Cuervo” Larroque, de cuya cartera depende el Organismo Provincial, porque “debe estar al tanto de todo esto”.
Asimismo, Fernández explicó que presentaron una medida cautelar en los tribunales de Lomas de Zamora. La jueza Belén Loguercio, del Juzgado de Familia Nº 2, dio lugar al planteo de los trabajadores, pero las autoridades no cumplieron con la orden judicial de garantizar los cuidados.
El sábado por la tarde, los trabajadores de guardia encontraron máscaras que estaban sucias y no las usaron. Además, señalan que no hay personal de limpieza y son los mismos trabajadores y los jóvenes, quienes tienen que hacer las desinfecciones.
Fernández fue uno de los infectados y está muy preocupado con la situación edilicia porque “tememos que haya un rebrote”, señaló que las desinfecciones son muy aisladas y “pedimos que se hagan todos los días por la multiplicidad de tareas en este contexto de pandemia”.
Otro de los planteos es que haya nombramiento de personal en las instituciones, ya que las situaciones de conflicto con los pibes se deben a la falta de atención, en muchos casos, en un contexto donde “están más tiempos encerrados y sin ver a sus familias”.
Molestos, se preguntaron por qué “nos nombran como esenciales, si no nos reconocen el bono y nos mandan a trabajar en duras condiciones”. Además, las autoridades no se comunican, desoyen los reclamos del sindicato y no hay ningún canal formal para comunicarse, todo lo hacen por mensajito.
Por todo esto, los trabajadores insisten en que las condiciones no están para trabajar “ni para los pibes ni para nosotros”. Tras la protesta, anunciaron que continuarán en estado de asamblea y, de no obtener respuestas, evaluarán medidas y responsabilizan a las autoridades de la situación.