En muchos rituales sexuales se suelen usar este tipo de complementos para fortalecer el juego de dominación y sumisión. Ellos tienen la peculiaridad de que podemos darle el uso que consideremos oportuno dependiendo la situación.
Las capuchas suelen ser de látex o de materiales llamativos que se utilizan para tapar la cara de una persona, estas suelen traer orificios en la nariz, en la boca o en los ojos. Son usadas por muchas personas que basan sus relaciones en sus fetiches y vienen acompañados de elementos como látigos, y ropa muy ajustada, del mismo género, o en su defecto, a medio descubrir, como los vestidos cortos de látex.
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— Diosas Empoderadas (@saykodelige29) June 1, 2020
Los collares eróticos tienen una función similar a la de las capuchas, pero la característica más llamativa es que están acompañados de una cuerda o correa, para hacer a la persona portadora el /la dominante de la relación.
Tener puesto uno de estos accesorios nos hace jugar un papel de sumisión absoluta, por lo que podremos usarlos en nuestra propia piel para dar poder a nuestra pareja, generando ese estado de morbo fundamental.
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