El pasado sábado durante una entrevista radial, Figueroa, integrante de la Cámara Federal de Casación Penal, se refirió a las "presiones" sufridas durante el gobierno de Cambiemos. "Aún votando de manera conjunta con colegas en algunas cuestiones más álgidas, políticamente, el ex presidente de la Nación públicamente decía que felicitaba a los otros dos jueces a pesar de las presiones que habían tenido por la jueza Figueroa, y habíamos votado los tres igual, por ejemplo", dijo.

También reclamó no volver a tener esa clase de pedidos: "No lo hicieron más personalmente, a través del poder político, pero sí lo hacían con títulos de diario", dijo y apuntó a un funcionario "por debajo del ministro (Germán) Garavano", quien la presionaba por el Memorándum con Irán y que habría sido Mahiques.

"Como puede advertirse, las manifestaciones de la jueza Figueroa revisten una gravedad inusitada. Lisa y llanamente, una magistrada que integra el máximo tribunal penal federal del país reconoció que, durante los últimos cuatro años, no solo ella, sino también muchos otros colegas, sufrieron presiones por parte de miembros del Poder Ejecutivo de la Nación e integrantes de servicios -aparentemente de inteligencia-, quienes se arrogaron ilícitamente la potestad de direccionar qué sentencias tienen que darse y con qué sentido o con qué dosificación de pena”, alertaron los diputados y senadores.

En la denuncia también se señaló que se podría estar frente a una asociación ilícita agravada, amenazas coactivas agravadas, abuso de autoridad y tráfico de influencias. Además, se solicitaron "los registros fílmicos, las imágenes, los libros de ingreso y egreso y cualquier otra constancia" que permita saber si entre diciembre de 2015 y diciembre 2019 jueces y fiscales estuvieron en la Casa Rosada, la AFI, el ministerio de Justicia o la Quinta de Olivos.