
A más de un mes de la implementación del aislamiento social, preventivo y obligatorio dictado por el gobierno, los números parecen haber acompañado la decisión del Alberto Fernández. El confinamiento tuvo dos etapas, y estamos llegando al final de la segunda, luego de que se haya decido extender para evitar la propagación del virus.
En un principio está estipulada como fecha final el próximo 26 de abril, aunque no está descartada la posibilidad de que vuelva a renovarse por algunos días más. Todo dependerá de la evolución de la pandemia en esta semana y, sobre todo, del acondicionamiento de los centros de salud de nuestro país para que puedan estar listos para albergar a grandes cantidades de pacientes.
Desde el inicio de esta cuarentena, ese fue el objetivo primordial: ganar tiempo para estar preparados cuando llegue el pico de contagios. Los especialistas afirman que será a principios de mayo, aunque no sabe con certeza si esa fase se puede adelantar o atrasar, por lo que las decisiones que se tomen deberán ser con mucha cautela.
Se sabe que nuestro sistema de salud no está en condiciones de afrontar una explosión de casos como sucedió por ejemplo en España e Italia, y en caso de que suceda algo así, provocaría un colapso general. Por eso, además de la intención de salvar vidas, el gobierno tomó al toro por las astas y resolvió decretar el aislamiento para poder sumar personal médico, camas, respiradores y todo tipo de insumos necesarios.
Pero la economía apremia, y luego de cuatro años catastróficos de caída en todos los índices, lo peor que le podía pasar a la Argentina es frenar la maquinar por un mes y unos pocos días. Los trabajadores de nuestro país no gozan del mejor nivel salarial y estructural desde hace décadas, algo que profundizó durante el gobierno de Mauricio Macri y que podría implosionar debido al Covid—19.
Por lo pronto, ya comenzó a regir una cuarentena focalizada y flexibilizada en algunas regiones del país que no cuentan con un gran número de casos. Este será el primer ensayo para saber si se puede levantar el confinamiento generalizado el próximo lunes, o si, por el contrario, en zonas como el AMBA y Capital Federal donde hay más contagios, continuará como hasta ahora.
Mientras tanto, se analizan a fondo distintas decisiones que podría tomar el Estado para nivelar la balanza comercial. Por un lado, el ya famoso Impuesto Patria a las grandes riquezas que abarcaría apenas al 1 por ciento de la población y, en las últimas horas, se conoció que podría existir la posibilidad de que el gobierno se haga cargo del pago del 50 por ciento del sueldo de los trabajadores del ámbito privado. Todo será foco de análisis en los próximos días mientras se estudia el resultado final de la cuarenta.