Jaqueados por los delincuentes, vecinos de un barrio del conurbano bonaerense ya no saben qué hacer
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“Pusimos alarma vecinal, pusimos luces LED, pero es lo mismo que nada”, aseguró muy desesperado a NOVA un vecino de Wilde, en el partido bonaerense de Avellaneda, que además relató que hace unos días cinco delincuentes se llevaron el auto de un vecino; y la noche de este lunes pasaron dos motos con dos ocupantes en cada una de ellas, armados. Aterrados por el hecho, solo les quedó tocar la alarma.
Avellaneda es un municipio gobernado por el peronista Jorge Ferraresi, anclado en el sur del conurbano bonaerense. Wilde es un barrio tranquilo con casas chorizo habitadas por familias laburantes de clase media. A esta altura lo único que piden es que haya seguridad para que puedan entrar y salir de sus viviendas sin el temor de ser atacados.
“Hace un año padecemos esta situación”, dijo el vecino que prefirió el anonimato ante posibles represalias. Aseguró que, si bien siempre hubo robos, en la actualidad “esto ya es alevoso, esto es diario, a cualquier hora del día”. Las cuadras más complicadas son Mariano Moreno, Lobos y Avenida Mitre, por el lado que lleva a Puente Pueyrredón. Además, señaló que a 15 cuadras está la villa del Triángulo de Bernal, por donde se escabullen los asaltantes.
Una de las formas que encontraron para acompañarse es mediante un grupo de WhatsApp, a través del cual se avisan “cuando llegamos y salimos”. Así se ven por la ventana y tocan la alarma. Pero ya no quieren vivir así, con esa ansiedad de saber que algo les puede pasar, “queremos que alguien tome cartas en el asunto”.
“La patrulla pasa dos o tres veces y nada más”, denunció el vecino entre la indignación y el miedo. Y la comisaría 5ta, de donde depende esa jurisdicción nunca les da interés a sus reclamos. Además, reveló que ya pidieron reuniones con la secretaria de Seguridad Ciudadana, Mónica Ghirelli, y con el mismo Ferraresi, pero hasta el momento no han sido atendidos.
Al respecto, en febrero de 2019 presentaron una carta y ahora van a volver a solicitar una audiencia con las autoridades locales, porque “ya la gente tiene miedo. Los delincuentes bajan armados y te hacen pasar un momento de mierda”, concluyó el vecino.