“Hola a todos, no acostumbro hacer esto, pero después de salir de trabajar me dirigía a mi casa caminando por Avenida del Libertador a unos pasos de pasar por el restaurante la Casona de Elisa, me cruza un masculino (con gorra y tapaboca) por la misma vereda casi frente a OSDE de manera sorpresiva e inesperada me aplica una trompada a puño cerrado en mi brazo derecho que me movió de mi posición inicial, lo primero que atiné fue decirles a gritos: ¿Pará tarado que te pasa, porque me pegas? y lo empiezo a seguir como le dije que lo iba a denunciar, se mete al restaurante y veo que cuatro hombres que estaban sentados en una mesa del restaurante lo echan del lugar, llego y les cuento que esa persona me acababa de pegar”, resaltó.

En este sentido, comentó que “llamo con mi celular a la comisaría de Mar de Ajo y me daba ocupado. En una de esas veo un patrullero y me cruzo en medio de la Avenida con brazos levantados (venían autos de las dos manos, pero sentía tanta impotencia, bronca, ni mi padre jamás me levantó la mano). Se detiene el móvil e indicó al oficial donde estaba mi agresor”.

“Como muestra la foto estaba sentado como si nada en el Café el Faro. Me comentan que es enfermo psiquiátrico, recuerdo y les comentó que también pegó con unos bolsos a Florencia Grandall, la hija de una amiga hace un par de semanas atrás también por Libertador a una cuadra del Hospital y a una enfermera que salía de trabajar de la Clínica Porres. No quiero que este hecho de violencia de género sea un caso más del montón que ya se comenta de este individuo, porque no lo conozco ni lo cruce en mi vida, sin motivo que mediara me agredió, no sentí miedo en ningún momento, pero no voy a dejar que esto quede inmune porque hoy fui yo, y otras más. Mañana puede ser tu mamá, tu abuela o una niña (al parecer les pega solo a las mujeres). Voy hasta las últimas consecuencias, este desgraciado, enfermo no puede estar suelto”, resaltó.

En ese sentido, una vez que radicó la denuncia contó que “el oficial llamó al hospital pidiendo una ambulancia que nunca llegó y dejó dicho que llamen al psiquiatra de este personaje para que lo vengan a buscar. Hasta cuándo vamos a permitir que esto siga pasando, no tiene familiar es lo que dicen, bueno no debe estar suelto como si nada”.

Las redes sociales estallaron y aparecen más casos, la sociedad costera conoce la situación desde hace tiempo, pero todo sigue igual. ¿Hasta cuándo?