Alto kiosco los muchachos: secuestraron más de 2.200 autopartes ilegales de un local de Warnes
Más de 2.200 piezas fueron secuestradas por la Policía de la Ciudad, tras un allanamiento realizado en un local del barrio de Chacarita, que formaba parte de una red de comercialización ilegal de autopartes.
Del procedimiento realizado días atrás participaron también inspectores de la Agencia Gubernamental de Control (AGC) y personal de Prevención Custodia de Bienes de la Sección Lucha contra la Comercialización de Autopartes Ilegales de la Subsecretaría de Seguridad Ciudadana del Ministerio de Justicia y Seguridad de la Ciudad.
Oficiales de la División Sumarios y Brigadas de Prevención de la Comuna 15 de la Policía de la Ciudad, que se encontraban realizando tareas de despliegue territorial, observaron días atrás a empleados de un comercio ubicado en la calle Warnes al 1.600 que acomodaban autopartes de autos en un volquete.
Al advertir esa situación, los efectivos policiales se entrevistaron con el encargado del negocio para corroborar si contaban con la autorización correspondiente para vender autopartes. En consecuencia, se estableció que el local tenía la habilitación vencida del RUDAC (Registro Único de Desarmaderos de Automotores y Actividades Conexas) y que algunas de las piezas expuestas para la venta no eran aptas para su comercialización.
Ante esta situación, se estableció consulta con la Fiscalía Penal Contravencional y de Faltas Número 4, a cargo del doctor Tereszko, quien dispuso la inspección integral del local con el objetivo de encontrar todas las autopartes que se encuentren en infracción a la Ley 25.761.
Como resultado de la inspección, se incautaron 2.246 autopartes en el local: 141 cajas de transmisión, 3 reductores de numeración, 17 núcleos de diferencial sin numeración, 325 ejes de caja, 92 carcasas de cajas de cambio, 57 carcasas de núcleo de transmisión, 515 engranajes de transmisión, 2 tapas de cárter, 140 ejes acanalados, 120 anillos de sincronizadora, 650 engranajes de caja, 14 porta coronas, 120 horquillas de caja y 50 cuádruples.
Todos los elementos secuestrados fueron trasladados a un galpón municipal.
Se estableció que en el local, las cajas de cambio, de procedencia ilícita, eran desmanteladas para extraer sus componentes internos, los cuales eran vendidos a clientes. Este comercio fue desbaratado y formaba parte de una red ilícita de la que se continúa investigando.