Jorge Brito y las posibles connotaciones políticas: ¿Accidente o muerte mafiosa?


La sorpresiva muerte del principal banquero argentino, Jorge Brito, sigue levantando polvareda y mientras la justicia avanza con la investigación y los peritajes sobre el helicóptero con el cual era transportado, comenzó a circular una versión que pone en duda todo lo actuado hasta el momento.
Los primero que hay que destacar es que el piloto privado del banquero, Santiago Beaudean, tenía licencia comercial desde el año 1997, por lo que contaba con vasta experiencia y horas de vuelos en aeronaves de distinto tipo, pero además estaba habituado a realizar el recorrido que finalmente lo llevó a la muerte.
"Era un viaje habitual de él. Venía en avión hasta la Capital, hacía alguna actividad y luego se iba a su campo en su helicóptero", aseguró en ese sentido el ministro de Seguridad de Salta, Juan Manuel Pulleiro, tras conocerse la noticia del accidente.
Es que efectivamente el viaje en el cual murieron Brito y su piloto, comenzó después de una reunión con el gobernador Gustavo Sáenz, y siempre respetando la rutina que regularmente los trasladaba hasta las propiedades del fundador del banco Macro.
La investigación apunta a la señalización de una “tirolesa”, que según las primeras versiones, sería la causante del accidente cuando el piloto y también instructor de vuelo no logró divisarla y tras golpearla terminó estrellando el helicóptero en el río en una zona cercana al dique Cabra Corral.
Esta versión se podría sostener para un piloto inexperto o bien para uno que no conociera la zona, pero cualquier especialista puede aclarar que para un conductor de aeronaves con amplia experiencia y conocimiento de la zona, sería muy difícil no divisar un obstáculo que está acostumbrado a sortear con cierta regularidad.
Además, el Helicóptero en el que viajaban, un Eurocopter AS350 Ecureuil, es una de las naves de uso privado más versátiles de ese tipo, a tal punto que es la única aeronave que fue capaz de despegar y aterrizar en el Monte Everest a 8550 metros de altura sobre el nivel de mar, por lo que ofrece las mejores posibilidades de esquivar cualquier obstáculo imprevisto.
Por eso en los pasillos del Juzgado de Garantías de Salta comenzó a circular una hipótesis, aún no abordada por la justicia, que indica que no se trato de un accidente o de una falla humana, sino de un atentado que incluyó elementos de alta tecnología y la posibilidad de pilotear el helicóptero de manera remota.
Algunos especialistas reconocen en off que es muy difícil pensar que Beaudean podría haberse equivocado respecto de la altura en el tramo dónde se ubica la tirolesa, por lo que es difícil encontrar una explicación que no ligue el siniestro a algún tipo de sabotaje.
Las motivaciones de semejante atentado están ligadas a la posición de Brito, cada vez más alejado del gobierno nacional, sobre todo desde que se erigió en referente de la “rebelión fiscal” que plantea el grupo de empresarios y financista más ricos del país, como respuesta al aporte solidario a las grandes fortunas.
Es que Brito tenía un fuerte ascendente entre sus pares, fue presidente de la Asociación de Bancos Privados de Argentina y de la Federación Latinoamericana de Bancos (FELABAN) entre 2012 y 2014, por lo que su llamado representaba un riesgo para las intenciones del gobierno nacional.