Según el parte policial, cuando efectivos de la fuerza llegaron al lugar para cumplir con la interrupción de la fiesta clandestina, el policía que participaba del acto ilegal increpó a sus colegas y luego se subió a una camioneta para darse a la fuga a alta velocidad y terminó embistiendo a la agente Micaela Sena, que era parte del operativo.

Ante la situación, los efectivos policiales emprendieron la búsqueda del hombre y llegaron hasta la intersección de la avenida Mac Lean y Malvinas Argentinas donde observaron un rodado con las mismas características a muy alta velocidad que se dirigía por la avenida Malvinas Argentinas y luego ingresa por una de las calles de la zona, estaciona en una vereda e intenta ingresar a un domicilio.

En ese momento, la policía que ya lo tenía seguido de cerca, impidió que ingrese a la vivienda, mientras el infractor se encontraba muy alterado y en aparente estado de ebriedad por el aliento etílico, según detallaron posteriormente.

Finalmente lograron atrapar a este policía que participaba de una fiesta clandestina, que increpó a otros efectivos que cumplían con su labor y que escapó a alta velocidad embistiendo a una colega, Micaela Sena, quien se llevó la peor parte de la noche.

Este es un hecho de gravedad, porque el protagonista es un policía que estaba borracho, armado y en un patrullero, pero además violó la cuarentena, cuando al resto de la sociedad se le pide “solidaridad” y que cumplan con los decretos y las leyes. Encima sin importar atropelló a una compañera. ¿Es esta la seguridad de Ariel Acuña y la ministra Gloria Zalazar, y el ministro de Gobierno Juan Manuel Chapo, todos elegidos por el gobernador Jorge Capitanich?