La legislación autoriza excepciones en el caso de personas con insuficiencias físicas previo certificado médico firmado por profesional matriculado, a la vez les permite tener un ayudante que también esté registrado con su identidad pero, en éste caso ello no ocurre.

Nos comunicamos con Rodolfo Silva, presidente del Centro de Industriales Panaderos del Oeste, que desconocía la situación, que el titular del comercio citado no es socio de la institución pero que averiguaría en el municipio sobre la irregularidad.

Comercios y talleres sin habilitación o con habilitaciones en categorías que no corresponden

Las denuncias que recibimos son constantes, se constatan en los barrios y también en las zonas céntricas. La ausencia de inspectores recorriendo el distrito es notoria, funcionan comercios sin habilitación que abrieron sus puertas a partir de 2016, pero, lo más grave es la falta de controles en seguridad e higiene. En góndolas algunos autoservicios ofrecen productos sin fecha de vencimiento o vencidas, además de no pagar las tasas, impuestos y aportes donde trabajan empleados. Además, quienes atienden a clientes no cuentan con libretas sanitarias.

En Fray Bottaro 3355, Castelar Sur, funciona un local adherido al Grupo Provinca que cobra servicios de telefonia, impuestos, universidades, medicina prepaga, habilitado el 2 de mayo de 2019 a nombre de Sandra Gladys Garcia, legajo 3-105947, partida N° 69531. Pero lo más llamativo es que las actividades autorizadas para su funcionamiento no son las reales que presta: almacen, despensa, fiambrería, comestibles envasados, productos lácteos y bebidas envasadas.

La grave irregularidad es que no puede realizar una actividad que no fué autorizada y por la que paga mensualmente tres veces menos de lo que debería. Si en la actualidad abona mil pesos mensuales el importe real que debería pagar es de 4 mil pesos. El local lleva cinco meses funcionando, y durante el tiempo transcurrido ningún inspector pasó por la zona o alguien ordenó omitir controles en la misma.

Los vecinos que se acercan para realizar sus pagos lo hacen desde la vereda y son atendidos a través de una ventana, lo que significa estar expuestos a posibles asaltos.

Otro hecho que no puede obviarse es que en el predio citado (Bottaro 3255) se construyó un local más que ofrecen en alquiler, que ambas edificaciones pertenecen al mismo grupo familiar que en septiembre de 2017 transfirió el autoservicio que explotaban a Wang Wenrui, que éste inauguró en junio de 2018 y donde varios ítems comerciales que tiene autorizados son similares a los de Sandra Gladys García y que no reflejan la verdadera explotación comercial que ella realiza.

En los barrios Seré, Santa Rosa, Marina, San Juan y de todas las localidades de Morón los vecinos conocen realidades similares, nos llaman y mencionan a funcionarios de Ramiro Tagliaferro que interceden para cubrir a comerciantes y talleristas mientras repiten: "Compran voluntades para evadir los impuestos que deberían abonar y nosotros pagamos la fiesta: ¿Lo hacen para comprar votos o por coimas?".