La oposición busca quedarse con puestos claves en el BAPRO para destrabar la ley fiscal de Kicillof
La sesión especial en ambas cámaras de la Legislatura bonaerense estaba convocada para este jueves, sin embargo la falta de acuerdo en el Senado hace peligrar el tratamiento de la Ley Impositiva que requiere el gobierno de Axel Kicillof, que cuenta con minoría en ese recinto, por lo que sí o sí necesita del acompañamiento de Juntos por el Cambio para convertir el proyecto en Ley.
Si bien desde las primeras horas de esta semana los senadores de la oposición advirtieron que no iban a tener el tiempo suficiente para leer y analizar el proyecto, lo cierto es que la negociación de fondo no tiene que ver precisamente con las modificaciones que en materia económica establece la nueva normativa en territorio bonaerense, sino más bien con acuerdos para ocupar lugares en varios organismos del Estado.
En provincia, a Kicillof le pasa algo parecido que a Fernández: JxC quiere patear para la semana que viene la Emergencia, sobre todo en el capítulo "deuda".
— I b á ñ e z (@ibanezsoy) December 18, 2019
Es parte de una negociación que incluye la designación de los directores del BAPRO.
Es cierto que para cumplir su rol y mostrar distancia con el oficialismo, la bancada del macrismo propondrá una segmentación alternativa para los impuestos provinciales, así como un tratamiento particular para algunos de los sectores de la economía de la provincia, pero la realidad es que en el centro de la escena está la elección de cuatro directores del Banco Provincia, así como el recambio en la Defensoría del Pueblo y en la Fiscalía de Estado.
En el primero de los casos la renovación es inevitable y tiene que ver con el cumplimiento del mandato de cuatro de los integrantes del Directorio y se enmarca en la eterna disputa de interpretación sobre cómo deben distribuirse los cargos entre oficialismo y oposición, ya que durante muchos años esos lugares estuvieron claramente al servicio de la negociación y de forma discrecional para el oficialismo de turno.
Durante la gestión de María Eugenia Vidal fueron designados en el banco tres directores de la oposición, que hoy reportan al Frente de Todos, pero que en ese momento estaban divididos entre el Frente Renovador y Unidad Ciudadana, con un massimo muy cercano al oficialismo de aquel entonces, al menos, en términos legislativos.