En esta misma línea, y enfocado en los comicios del próximo 27 de octubre, Baldo remarcó que “creemos que la diferencia que tuvimos está más acortada y que los últimos días son los que nos van a poner de cara a las elecciones con muchas posibilidades de ganarlas y de repetir el resultado que tuvimos en el año 2017”, cuando las urnas decretaron que asuma en el Concejo Deliberante.

Por otra parte, sobre su orientación política y su pasado en Villa Gesell, remarcó que “nosotros siempre tuvimos en nuestros tres mandatos una amplitud de convocar a otras fuerzas políticas, soy de origen radical, pero nos tocó gobernar tres mandatos en situación de mucha crisis entre 1995 y 2007 y siempre lo hicimos con una capacidad de convocatoria hacia otras fuerzas”.

Sobre las diferencias que encontraría en caso de volver a la intendencia, expresó que “la ciudad está totalmente distinta y hay que adaptarse. Seguramente el Censo del año que viene va a dar 50 mil habitantes, casi el doble de lo que teníamos cuando nos tocó comenzar a gobernar, pero esa también va a ser una diferencia que tiene que ver con una situación presupuestaria distinta”.

Por tal motivo, sostuvo que al estar polarizada la elección, será importante lograr consensos, aunque advirtió que “al Frente de Todos lo notamos muy rígidos con la posibilidad del diálogo y del acuerdo, pero es lo necesario. Nosotros ganamos en 2017 con una clara consigna, que era diálogo y trabajo en conjunto. Lo hemos intentado, no salió para muchas cosas lamentablemente que han quedado en el camino”.

Al respecto, manifestó que no se lograron debido a que Barrera “se perfiló en la confrontación tanto con el gobierno de Mauricio Macri como con el de María Eugenia Vidal, pero nuestro equipo tiene claro que el único camino posible, desde el oficialismo o desde la oposición, donde nos toque, es el diálogo y buscar los consensos necesarios”.

Sobre la situación del distrito, Baldo dijo que “una gran preocupación es el crecimiento descontrolado de sectores de la comunidad no planificados y que se traduce en toma de terrenos y usurpaciones. Hemos planteado una tolerancia cero a eso y creemos que va a ser una primera medida” en caso de un triunfo y de volver a conducir la ciudad.

Por último, el candidato a intendente de Juntos por el Cambio sentenció que “estoy convencido de que el camino es este, alineado con el vicegobernador, Daniel Salvador. Me parece que aun en un escenario que no es el que deseamos ni el que creemos que sea el ideal ni para la provincia ni para la nación, seguir trabajando para consolidar un espacio que creo que representa mucho más que lo que representamos individualmente los partidos que los componemos”.