Los argumentos que esgrimió el juez Carlos Herrera a la hora de levantar el embargo contra la Municipalidad de Necochea interpuesto por la empresa recolectora de residuos sólidos Relisa SA, levantaron polvareda, dado que reconoció que la Municipalidad está fundida.

En la presentación, el juez en lo contencioso administrativo reconoció que "la Municipalidad está haciendo frente a sus compromisos tanto para el pago de los empleados como a los distintos proveedores, está afrontando dichas deudas en cuotas, otras las está difiriendo y otras no las está abonando; y en caso de que se concrete el embargo, aunque no sea de cuentas afectadas pero al ser operativas, se afectaría gravemente el interés público".

Herrera le dio la derecha al intendente Facundo López apagando el incendio a menos de un mes de las elecciones generales, al reconocer que si el embargo se hace efectivo no se podrían pagar sueldos "y esto sí traería un mayor descontento social al que ya está debido al pago en cuotas de los salarios".

Más allá de la manito de la justicia, a la Municipalidad de Necochea no hay mucho que embargarle. De acuerdo al escrito presentado por el abogado Julio Zapata el pasado 5 de septiembre, el municipio estaba a horas del vencimiento del plazo legal para el pago de sueldos y en las cuentas bancarias no había un peso.

Según ese informe, el costo en salarios de los trabajadores para el mes de agosto, sin contar la planta política, era de 60.131.128 pesos. Además se adjuntó una serie de compromisos que terminaron por doblar la voluntad del magistrado en favor de la Municipalidad de Necochea, como por ejemplo el pago de cheques diferidos emitidos el 4 de septiembre con vencimiento en el transcurso del mes en curso, entre los que se cuentan un pago de 17 millones de pesos a Relisa, 5 millones en insumos para el hospital, 1 millón en obras y 330 mil pesos para gastos de correo.

A pesar del enorme gasto acumulado y los compromisos con vencimiento inminente, en la cuenta de rentas generales que la administración local posee en el Banco Provincia (cuenta 6177-20173/1) sólo contaban con poco más de 3 millones de pesos.